Diego Cadavid quien había confesado su responsabilidad en el asesinato de su hija de apenas 18 meses, se retractó. En entrevista para un medio local, aseguró que fue drogado y que no recuerda qué pasó con su hija.
El cuerpo de Sofía Cadavid, de apenas 18 meses de edad, fue encontrado en la madrugada del viernes 18 de diciembre en una zona boscosa, entre los barrios El Llanito y Porvenir, del municipio de Rionegro (Antioquia). En ese momento, se confirmó la peor de las noticias, la pequeña había sido asesinada. Lo más inquietante del caso es que el padre de Sofía, Diego Cadavid, fue quien le indicó a los uniformados de la Policía el lugar exacto en el que se econtraba el cuerpo de la bebé y, según la versión oficial, el hombre “reconoció en interrogatorio que había asesinado a su propia hija”.
La niña había sido reportada como desaparecida el jueves 17 de diciembre. Sus familiares lanzaron la alerta luego de que la pequeña saliera de su casa a mediodía acompañada del papá, con quien nadie había podido contactarse después. Sin embargo, en horas de la noche de ese día, las autoridades encontraron al padre de la menor desorientado deambulando por las calles del municipio y con una camisa que tenía vestigios de sangre. Los agentes lo asistieron, mientras lo interrogaban por el paradero de la niña, pero él aseguraba no recordar nada y no daba razon del paradero de su hija.
Sin embargo, ya en horas de la madrugada, cuando empredieron la búsqueda de la niña, el mismo Diego Cadavid llevó a los uniformados al lugar en el que ella yacía. “El presunto homicida reconoció en interrogatorio que había asesinado a su propia hija (…) le vamos a imputar el feminicidio agravado ante juez de garantías”, declaró el viernes el fiscal general, Francisco Barbosa. Además, a través de un comunicado público, el ente investigador informó que “se logró evidenciar que el indiciado habría ultimado a golpes a la menor por una supuesta venganza en contra de su expareja y madre de la niña”. El caso despertó la indignación de los colombianos y en Rionegro varias personas salieron a manifestarse por el asesinato de la pequeña y a rendirle un tributo.
Mientras tanto, Diego Cadavid quedó a disposición de las autoridades y fue presentando ante un juez de control de garantías que lo consideró un peligro para la sociedad y ordenó su detención preventiva. Esa audiencia finalizó pasadas las 8:00 de la noche del viernes y justo después de salir de la diligencia, el confeso feminicida le concedió una entrevista al medio local Mi Oriente en la que, sorpresivamente, cambió su versión de los hechos. Aseguró ser inocente del asesinato de su hija y manifestó que había sido drogado y que no puede recordar qué fue lo que pasó. Además, reiterativamente se refirió a la mala relación que sostenía con la familia de la mamá de Sofía.
“Con respecto a lo que pasó con mi hija, fui drogado. Yo iba a llevar a la niña derechito a la casa de donde vive Luisa (mamá) y a partir de que fui drogado, perdí la noción del tiempo, del espacio, de mis decisiones, en adeante no recuerdo nada. Yo también estoy golpeado, tengo la cabeza llena de ‘chichones’, laceraciones en el cuerpo, en las manos, en los puños, como si hubiera peleado con alguien. Sería incapaz de atentar contra la vida de mi hija, más fácil me la hubiera quitado yo primero”, aseguró Cadavid en su nueva versión en la que dijo que “esas personas que que vienen como a arreglar los autos o a limpiar el parabrisas me arrojaron algo y así quedé”.
Cuando el periodista lo cuestionó sobre por qué entonces había informado el lugar exacto en el que estaba el cuerpo de su hija, respondió que cuando estaba en el carro con los Policías buscando a la pequeña tuvo un “pantallazo” (recuerdo) y supo que su hija estaba en ese lugar. Además, dijo que no se encontraba bien cuando manifestó que había asesinado a Sofía.“No pude dormir nada porque me mantuvieron andando en carro toda la noche, apareció un abogado a las 5:00 de la mañana, no me consideraba que estaba bien y tuve esas declaraciones”.
Agregó que más que una venganza contra la mamá de la niña -como lo había confensado, según la Fiscalía-, el “desorden mental” que tiene se debe a la “humillación a la que he sido sometido por parte de esa familia en los últimos ocho meses”. En ese sentido, expresó que en abril los familiares maternos de su hija lo agredieron y hasta lo amenazaron con un machete,y que tiene videos de este episodio. Además, que le pedían mucho dinero por la manutención de su bebé, a cambio de una hora de compartir con la niña. Incluso, dijo que tanto Sofía como su mamá estuvieron contagiadas de COVID-19 por el descuido de la madre que la llevaba a visitar las tías.
Durante 13 minutos que duró la entrevista, Diego Cadavid se empeñó en limpiar su nombre asegurando que llegará hasta las últimas consecuencias para demostrar que es inocente y que tiene su consciencia tranquila. Ante la retractación del procesado y la contradición entre sus versiones, serán las autoridades las encargadas de esclarecer la responsabilidad de Cadavid en el feminicidio de la pequeña Sofía.