La supuesta influenciadora, de 25 años, quien se dedica aparentemente a la realización de contenido de entretenimiento para adultos, ha causado polémica entre los taxistas de Bucaramanga, tras conocerse un video en el que ella habría pagado una carrera ofreciéndole sexo al conductor.
El contenido, que se conoció a través de redes sociales, generó alerta en las autoridades de la ciudad y consternación entre los habitantes, ya que han catalogado los actos como una irresponsabilidad, tras la pandemia que se vive en el país, pues todo parece indicar que infringieron las normas de bioseguridad, al sobrepasar la película de aislamiento que la mayoría de vehículos porta.
La grabación, al parecer, fue en alguno de los barrios de Floridablanca. La mujer, en la introducción del video señala que va a tomar un taxi y va a fingir que no tiene dinero para que al final la lleve gratis o, de lo contrario, le ofrecerá sexo como medio de pago por la carrera.
De acuerdo con el video, la joven toma el taxi y le indica al conductor que la lleve al centro de Bucaramanga, una vez llegan allí, la mujer ejecuta su intención y a la final resulta teniendo sexo con el conductor.
Horas más tarde, que la mujer revelara la grabación, el contenido se volvió viral e inmediatamente provocó gran polémica entre el gremio de los taxistas quienes indicaron a Caracol Radio que querían desprestigiarlos y que por ello solicitaban a la autoridades que investiguen este tema y, además, se indague sobre la mujer que al parecer ha grabado más videos en la ciudad.
Sin embargo, este asunto no es aislado de una tendencia que ha tomado fuerza en estos meses tras la pandemia y la clausura de moteles en la Bucaramanga, una modalidad llamada ‘Carsex’ el cual, según Wilson Sáenz, uno de los veedores de la conocida ‘Mancha amarilla’ en Bucaramanga, le aseguró a CM& Noticias que consiste en solicitar, por medio de plataformas digitales, el alquiler de un carro para poder tener relaciones sexuales.
“Ellos mismos publican lo que se atreven a hacer en estos vehículos, y en estos días vimos un video en donde, desafortunadamente, están teniendo sexo en la avenida La Rosita”, en Bucaramanga, comentó al noticiero Sáenz.
Asimismo, el veedor mostró varias capturas de pantalla para denunciar que, en ocasiones, son los mismos pasajeros los que piden el servicio.
Según la información dada a conocer por el vocero de los taxistas, existen servicios entre los $7.000 hasta los $40.000, en lo que los usuarios pueden solicitar de manera específica el servicio, por ejemplo, indican que desean un servicio con final feliz en un aveo.
“Quiero servicio de final feliz, con un conductor gay dispuesto a una orgía”, “necesito un conductor grande y fuerte”, “estoy estresadita, quiero sexo y tengo sitio. Soy una dama sencilla”, se lee en varias de las imágenes que divulgó el noticiero.
De acuerdo con el secretario de la Alcaldía de Bucaramanga, David Cavanzo, afirmó que “esto afecta la salud pública, estamos en medio una pandemia”.
Además, señaló que los pasajeros no tienen la tranquilidad “de poder disfrutar de un viaje sin saber que haya pasado al interior de los vehículos”, por lo que anunció que las autoridades se pondrán al frente de estos casos.