Funcionarios del CTI de la Fiscalía Seccional Atlántico y agentes de la Policía Metropolitana de Barranquilla arrestaron a un hombre de 45 años, acusado de abusar sexualmente de sus cinco hijos, cuatro niños y una niña, durante al menos 8 años de manera continua.
La investigación comenzó después de una denuncia presentada por el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) sobre el supuesto abuso de una menor.
La denuncia inicial surgió cuando una persona cercana a la familia informó que la niña había sido abusada por su padre, lo que llevó a que la menor quedara bajo la protección del ICBF. Las autoridades, en coordinación con la Fiscalía, descubrieron a través de entrevistas y análisis tecnológicos que los otros cuatro hermanos también habrían sido víctimas de abuso.
El padre tenía la custodia de los hijos después de separarse de la madre biológica. En un momento, dejó a los niños al cuidado de su abuela, quien lo demandó por alimentos, lo que provocó que él regresara y retomara la custodia. Según la investigación, el hombre sometió a sus hijos a abusos sexuales y los obligaba a tener relaciones sexuales entre ellos. Para evitar ser denunciado, utilizaba la devoción cristiana de los niños, convenciéndolos de que solo Dios podía juzgarlo.
La valentía de la menor, que reveló los abusos a una persona cercana, permitió que el caso saliera a la luz y que se descubriera que sus hermanos también habían sido abusados, dos de los cuales ya son adultos. Este acto de coraje fue fundamental para que las autoridades pudieran actuar.
Este caso destaca la efectividad de las rutas de atención en delitos de este tipo y la importancia de la cooperación entre la comunidad y las autoridades.