Francisco Javier Martínez Ardila, conocido como «Pacho malo», ha pasado de ser un destacado coordinador del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) en Buenaventura a protagonizar titulares en medios por su reciente captura este jueves 22 de febrero en Medellín.
Su vinculación a una presunta red de contrabando y narcotráfico que operaba en Medellín, Bogotá y Buenaventura ha puesto bajo la lupa sus actividades y su antiguo rol como agente del CTI.
Martínez Ardila inició su carrera en el DAS como asistente de investigación entre el 11 de julio de 2002 y el 31 de diciembre de 2011. Luego pasó al CTI, donde ocupó diversos cargos, incluyendo el de coordinador en la ciudad de Buenaventura. Sin embargo, su rápida ascensión en el mundo de la investigación criminal también estuvo marcada por algunos otros cuestionables acontecimientos.
Según revelaciones de la Revista Raya y Rtvc Noticias, desde su posición como coordinador del CTI en Buenaventura, Martínez Ardila habría conformado una red dedicada al tráfico de drogas y contrabando.
Estas actividades fueron denunciadas en el año 2021, arrojando luz sobre la supuesta doble vida de este antiguo agente del CTI. En Medellín, se señala que ‘Pacho malo’ permitía el tráfico de drogas y posiblemente armas en contenedores que salían desde el puerto de Buenaventura.
De acuerdo con lo publicado por la revista Raya ‘Pacho malo’ se encargaba de introducir droga en navíos, en Buenaventura, droga con un valor entre los 8 y los 9 millones de pesos por cada kg para luego ser llevada en contenedores de entre 40 y 300 kg.
La droga tenía como destino Guatemala, México, otros países de Centroamérica, así como Europa, con países como Francia y España.
Las acusaciones, inicialmente denunciadas por uno de los investigadores del caso, fueron llevadas a la atención de la cúpula de la Fiscalía General de la Nación, detallando las presuntas acciones ilícitas de Martínez Ardila.
RTVC