Formulan cargos a exrector de la U. del Atlántico que habría pedido sexo a estudiantes a cambio de contratos

Según explicó la Procuraduría, Carlos Javier Prasca Muñoz pudo haber vulnerado los “principios de igualdad y moralidad que rigen la función administrativa”.

La Procuraduría General de la Nación formuló pliego de cargos al exrector de la Universidad del Atlántico Carlos Javier Prasca Muñoz, quien estuvo al frente de la institución entre 2017 y 2019, por presunta extralimitación de funciones al utilizar su cargo para la supuesta obtención de favores sexuales de alumnas de la institución educativa.

Según el ente de control, Prasca Muñoz habría incumplido con el deber de tratar con respeto, imparcialidad y rectitud a las estudiantes, al presuntamente usar las dependencias de la universidad para propiciar encuentros íntimos y generar acercamientos de alto contenido sexual a través de llamadas telefónicas y conversaciones en redes sociales.

Según explicó la Procuraduría, el exrector pudo haber vulnerado los “principios de igualdad y moralidad que rigen la función administrativa”.

“La falta fue calificada de manera provisional como grave cometida a título de dolo, teniendo en cuenta que el exfuncionario aparentemente estaba consciente de la gravedad de su comportamiento, y amparado en su cargo habría actuado para satisfacer sus deseos”, se lee en el comunicado de la Procuraduría.

El escándalo de Prasca Muñoz se intensificó a principios de 2019 cuando varios medios de comunicación revelaron unas conversaciones que habría tenido el exrector a través de su perfil de Facebook con una joven mujer de 24 años de edad, que sería estudiante de ingeniería industrial de la Universidad del Atlántico.

Así mismo revelaron una fotografía en la que se ve a Prasca Muñoz desnudo en lo que sería la habitación de un hotel.

Tras conocerse el hecho, Prasca Muñoz se pronunció y aseguró que tenía conocimiento de los chats y de las fotografías y fue enfático en señalar que todo hacía parte de un plan orquestado por las personas que querían tener el poder de la Universidad del Atlántico.

En febrero de 2019 y tras el escándalo, el exfuncionario recibió el beneficio de duda por parte del Consejo Superior de la institución, que se reunió durante ocho horas para tratar el primer caso de denuncia sexual que lo involucraba con la estudiante Laura Romero.

En ese momento, el cuerpo colegiado decidió acoger los principios de “presunción de inocencia y el derecho al debido proceso” y así aguardar los resultados de las investigaciones que desde entonces estaban en curso ante la Procuraduría.

Tras la decisión del Consejo Superior, Prasca Muñoz, continuó en su cargo, sin embargo, en noviembre de 2019 y luego de una masiva movilización de estudiantes, el entonces rector renunció a su cargo.

La movilización de los y las estudiantes de la Universidad del Atlántico tuvo lugar en medio de las manifestaciones que se originaron en todo el país desde el 21 de noviembre y que desencadenó una oleada de disturbios en varias ciudades principales.

En medio de las protestas en la institución, Pracas Muñoz ordenó el ingreso del Esmad, en medio del operativo, algunos estudiantes denunciaron que los uniformados golpearon y capturaron a jóvenes que no hicieron parte de los desmanes.

En redes sociales quedaron los registros de los cientos de estudiantes que se tomaron la ciudad para presionar al gobernador Eduardo Verano a remover a Prasca de su cargo. Si bien, para muchos la presión de los estudiantes ayudó a que Prasca presentara su carta de renuncia.

Prasca Muñoz fue designado rector de La Universidad del Atlántico el 22 de junio de 2017.

Su nombramiento estuvo marcado por interminables resistencias internas, oposiciones, división al interior del Consejo Superior, impugnaciones de las calidades de los miembros y una demanda ante el Consejo de Estado que finalmente no prosperó.